viernes, 4 de febrero de 2022

Clásicos del cine negro (19 ):” Mulholland drive” ( 2001 )



Disponible en Apple TV y Filmin.

Dirección: David Lynch.
Reparto: Naomi Watts, Laura Herring, Justin Theroux, Ann Miller, Melissa George.
 Fascinante y onírica obra de arte del como siempre extraño y complejo  David Lynch. Al director de “ Twin peaks” se le ama o se lo odia. Su cine es muy personal y diferente, no apto para un público al que le gusten las tramas masticadas y fáciles de entender sin ningún esfuerzo. Se trata probablemente de la mejor película de su carrera ( en algunas encuestas ha sido elegida la mejor película del siglo XXI ) en la que el director realiza un filme noir en sus primeros 2/3 de metraje, dando un desconcertante giro en su tercio final que descoloca al espectador, que asiste a una película distinta ( es como si empezara otra película en la que los mismos personajes tienen un rol distinto ) que nos hace revisar la primera parte de la historia con otros ojos distintos, dejándonos noqueados con su final.






  Con un arranque aparentemente convencional en cuanto a su argumento, pero con el toque muy especial que imprime Lynch a sus películas, se cuenta la historia de una joven ( Harring ) que tras un accidente de tráfico en el que fallece su acompañante, pierde la memoria y llega a un apartamento del que se acaba de marchar su propietaria entrando en contacto con la sobrina ( Watts ) de ésta que llega allí a pasar unos días en dicho apartamento buscando triunfar como actriz en Hollywood. Ambas se hacen amigas y la aspirante actriz decide ayudar a la chica amnésica a descubrir quién es y cuál es su pasado. Paralelamente asistimos a los problemas previos a un rodaje que tiene un peculiar director ( Theroux ) al que unos gánsters tratan de imponerle en su futura película a la actriz principal… Sin embargo cuando en el curso de sus pesquisas, las dos protagonistas acudan al misterioso local nocturno llamado “ Silencio”, toda la película se pondrá patas arriba, así como la existencia de ambas mujeres y el espectador empezará a ver una trama más cercana a un drama pasional y a una tragedia y asistirá a un final cercano al cine de terror.
 


  “ Mulholland drive” es innovadora y genial entre otras cosas por su estructura especial al encerrar en su complicado argumento dos películas opuestas y complementarias: una que podría bien ser un sueño de una de las protagonistas ( lo que querría que hubiera pasado ) es una cinta de suspense con toques incluso de comedia negra y con un ritmo envolvente, que hace que no podamos despegar los ojos de la pantalla y la otra ( la historia en apariencia real ) es una pesadilla enfermiza en la que las piezas que se nos han ido mostrando en los primeros 90 minutos se recolocan de un modo totalmente diferente al que hubiésemos esperado. Todo ello es mérito del laberíntico y sugerente guión magníficamente escrito por el propio Lynch, su enigmática banda sonora, así como por la fascinación visual que logra con su película y la brutal interpretación de una por entonces desconocida Naomi Watts, que da todo un “tour de force” ( la escena del casting - la mas difícil interpretativamente - es un recital impresionante de la actriz ) de variados y opuestos registros ( es una chica ingenua y soñadora, una amante despechada, una chica alegre, una mujer rota, alguien inocente, pero también obsesiva …) La actriz logra con pasmosa facilidad interpretar todos esos variados registros, como también se ve en la escena de la cena de compromiso en la que en tan sólo minuto y medio, desfilan por el rostro y la mirada de Watts sucesivas emociones  sin tener que decir una palabra para llegar al espectador.



 Lynch retrata el lado oscuro de Hollywood a través de los personajes de Watts y Herring, una ciudad a donde llegan personas con sueños volcados en el mundo del cine y que en muchas ocasiones acaban muy mal y en donde a veces la mafia  ( impagable la escena del café )como ya nos mostró “ El Padrino “ presiona para imponer a actores y actrices en los repartos. El director introduce en algunas escenas  bastante humor ( con guiños a los hermanos Coen y Tarantino ) como en la escena en la que a un sicario se le complica una ejecución o en la del descubrimiento de la  infidelidad en una mansión, aunque el tono general es inquietante y misterioso.  



 Lynch, en un homenaje al film  “ Sunset Boulevard” ( en España renombrada “ El crepúsculo de los dioses “ ) de Billy Wilder, titula la película como la famosa calle donde viven muchas estrellas como símbolo de ese Hollywood soñado e idealizado al que aspiran las protagonistas. La película también aborda temas como los celos, la obsesión amorosa, la ambición sin límites y la manipulación emocional de la que es capaz uno de los personajes.



  Ideada como el episodio piloto de una futura serie, las cadenas de tv la rechazaron y casi dos años después, el realizador logró apoyo económico para transformarlo en una película y Lynch rodó por ello nuevo material. Seguramente por eso hay varias tramas paralelas y cabos sueltos sin resolver del todo y en algunos momentos tiene un formato televisivo que sin embargo no la acaba de perjudicar. Aunque desde su estreno muchos han elaborado teorías de todo tipo para explicar su intrincada y laberíntico guión, Lynch rechazó dar una explicación al film, dejando que cada cual libremente diese su personal interpretación de la cinta, porque más que interpretar la película, hay que vivirla y dejarse llevar sin más, disfrutando del espectáculo que nos muestra el director. La escena en el club “ Silencio” donde las actuaciones son una ilusión, es una perfecta metáfora del sentido de la película.



Lo mejor: El excepcional trabajo como director de Lynch, el impresionante trabajo de Naomi Watts y un guión rompecabezas que es mejor no racionalizar, porque es imposible.
Lo peor: En algunos momentos se acerca visualmente a un telefilm y que algunos espectadores le busquen tres pies al gato o por no entenderla, la puedan descalificar.






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