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Dirección: John Ford.
Reparto: John Wayne, Maureen O’Hara, Claude Jarman Jr, Ben Johnson, Victor McLaren.
Considerado por muchos el mejor director de la historia del cine, John Ford es el más oscarizado ( ganó 4 oscars como realizador de películas de ficción - tres llevaba en 1950- y dos más por dos documéntales de la Segunda Guerra Mundial - grabó la Batalla de Midway siendo de hecho herido durante el combate - ) Acusado injustamente de fascista, militarista y racista por su visión de la caballería y de los índios, su retrato de éstos y el injusto trato recibido por el ejército en “ El gran combate “ y su denuncia del racismo en “ El sargento negro” desmienten esas acusaciones de racista al igual que su defensa del director Joseph Mankiewicz durante la caza de brujas desmiente que fuese un extremista político. Aunque se autodefinía como director de westerns, abordó casi todos los géneros con maestría : cine bélico (“ No eran indispensables “ ) comedia ( “ La taberna del irlandés” ) aventuras ( “ Mogambo” ) cine de época ( “ María Estuardo “ ) drama ( “ El delator “ ) cine romántico ( “ El hombre tranquilo “)..
Tercer film de su trilogía de la caballería ( junto a “ Fort Apache “ y “ La legion invencible” ) Ford muestra como en las otras dos cintas la vida de camaradería, compañerismo fidelidad a unos valores y arrojo de los soldados y su vida espartana y llena de peligros. Wayne es el coronel que manda las tropas que controlan la frontera con México que viene marcada por el Río Grande y en la que se producen continuas incursiones de los apaches. A su campamento llega su hijo ( Jarman Jr ) que tras haber suspendido en West Point, se ha incorporado sin saberlo su padre a la caballería, debiendo ponerse como uno más a las órdenes de Wayne. Detrás del joven, llega también su madre ( O’ Hara ) a la que no ve desde los tiempos de la guerra civil y que pide a su marido que licencie a su hijo…
“ Rio Grande” presenta todas las virtudes del cine de su creador: es una película con una hermosa y muy poética fotografía en blanco y negro ( con unos especulares planos del desierto y del río que da título al film ) una puesta en escena precisa, un ritmo narrativo que no decae en ningún momento ( las escenas de combates con los indios son vibrantes ) y una sencillez y claridad en su dirección que acredita a Ford como un realizador conciso y directo, en cuyas películas no sobra ni falta nada.
Wayne, actor fetiche del director, realiza su mejor interpretación bajo la batuta de Ford hasta ese momento ( en la que es su mejor interpretación haste está esa fecha junto a “ Río rojo “ -1948- que una vez vio Ford exclamó : “ ¡ vaya si ese hijo de puta sabe actuar” ! ) Al igual que “ La legión invencible” es un militar veterano entregado y cuerpo y alma a la milicia, que ha sacrificado su vida personal por el ejército ( no ha visto crecer a su hijo ni ha visto a su esposa en 15 años ) Con sus soldados es un hombre rígido, pero recto y justo, con gran carisma para que todos le sigan con los ojos cerrados. Las miradas que dirige el actor a su hijo y su esposa son de lo mejor de la contenida interpretación de Wayne, que borda su personaje, dotándolo de autoridad, pero también de una gran humanidad e incluso en la recta final del fin de vulnerabilidad. La reaparición de su esposa sacudirá su vida castrense llena de peligros y supondrá remover sentimientos que él tenía probablemente olvidados.
O’ Hara ( bellísima como siempre ) que ya había trabajado con anterioridad con Ford, coincidía por primera vez con “el Duque” ( apodo de Wayne )dos años antes de su maravillosa historia de amor en “ El hombre tranquilo “ último Oscar de Ford como director ) y se harían grandes amigos en la vida real y aunque quizás es joven para el papel, interpreta de nuevo uno de esos personajes con coraje, fuerte personalidad y carácter a los que nos tiene acostumbrados, que como York ( Wayne ) cuando la mira, se nota que se derrite por él. Aunque orgullosa y testaruda, desde que vuelve a ver a York, su amor por él es evidente.
Una película muy representativa del cine de su autor, que inició una década de gran madurez en su cine y que siendo de sus films menos conocidos, seguramente sorprenderá por eso a los que no la hayan visto, que podrán disfrutar de una película de muy ágil visión, que alterna humor ( Gracias al personaje de Maclaren ) acción y momentos intimistas poéticos ( por ejemplo las escenas nocturnas con los saldados cantando canciones ).
Lo mejor: El gran trabajo de Wayne, el brillante trabajo de Ford como realizador y una fotografía memorable.
Lo peor: Quizá sea la menos redonda de la trilogía del director sobre la caballería, pero es un film para descubrir por los que conocen menos en profundad la filmografía del realizador.
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