miércoles, 1 de abril de 2020

“ 50 películas que hay que ver antes de morir ( 14 ) “ El chico “ ( 1921 )



Dirección:Charles Chaplin.
Reparto : Charles Chaplin, Jackie Coogan, Edna Purviance.
  
  Primer largometraje de Chaplin tras sus exitosos cortometrajes interpretando a Charlot ( la primera aparición del personaje fue en 1914 ) que lo habían convertido probablemente en el hombre más famoso del planeta en su tiempo . Esta deliciosa, conmovedora y divertida película, supuso el inicio de su serie de maravillosos largometrajes que culminarían con “ El gran dictator “ en 1940 y aunque otros films posteriores como “ Luces de ciudad “ o “ La quimera del oro “ son más redondos, “ El chico” le abrió a su director nuevos caminos, que sin esta pequeña joya, no hubieran sido posibles.



  Chaplin concibió esta película tras el fallecimiento prematuro de su primer hijo y recordando las penurias de su infancia en Londres en donde vivió en la miseria con su madre y su hermano Sidney. En 1919 había fundado junto a Mary Pickford, Douglas Fairbanks y Mary Pickford la productora “ United Artist “ y estaba casado con Mildred Harris con la que atravesaba una crisis matrimonial que lo condujo al divorcio y que le había engañado con un presunto embarazo. Poco antes del rodaje de “ El chico” falleció su hijo Norman a las 70 horas de nacer. Este hecho la marcó profundamente e influyó en la concepción de su próxima película . 
 


  Una mujer ( Pueviance ) abandona a su bebé  debido a su pobreza, dejándolo en un coche frente a una mansión. El bebé después de varías vicisitudes ira a parar a manos de un entrañable y pillo hombre de muy escasos recursos ( Chaplin) cuya vida roza la indigencia . Cinco años  más tarde, el hombre y el niño sobreviven como pueden con pequeños timos y se han convertido en inseparables. Ahora sin embargo su madre es una artista rica, que no ha olvidado a su hijo y añora encontrarlo. Chaplin realizó un film con más elementos dramáticos que sus cortometrajes, alternando momentos desternillantes ( la escena de la pelea de boxeo en la calle sobre  todo ) y otros muy emotivos que tocan el corazón del espectador ( su tramo final especialmente ) con pasmosa facilidad . El encanto y desparpajo  de Coogan ( un niño artista como el propio director que debutó en el teatro con solo 5 años ) y su química con el actor-director dan al film un encanto, ternura y complicidad inolvidables.


  El cineasta aborda de nuevo lo temas habituales en su cine como la dignidad de los pobres, la crítica social ( que años más tarde provocaría que fuese tachado de comunista y expulsado de EEUU )  la picaresca para eludir la pobreza, el retrato cariñoso de los más desfavorecidos, la avaricia de los ricos, el retrato los personajes de los policías como malvados de la función, a los que se añade un hermoso retrato de la paternidad y el cariño incondicional entre un padre y un hijo de lucha por superar todas las barreras que sufren los entrañables protagonistas. Si los ecos de Dickens en su cine son notables, en este film, con un niño huérfano que luchará por eludir el orfanato como protagonista,  la influencia del creador de “Oliver Twist” es indiscutible.




  El gran talento del director como narrador del cómico logra superar la  dificultad de contar sin palabras con solo gestos y planos estáticos los sentimientos y pensamientos de los personajes y lograr que avance la acción con un ritmo ágil que hace que la película se pase volando, innovando técnicamente sobre todo en la penúltima escena del sueño, todo un prodigio de imaginación y puesta en escena.



Lo mejor : El enorme talento de Chaplin y su química con el pequeño Coogan.
Lo peor : Que pueda echar para atrás a algunos espectadores por ser muda.

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